La vida es una paradoja
que se contradice
y se reafirma sobre sí misma.
Para morir hay que nacer,
para nacer
otras millones de células
haploides
deben morir.
Y seguimos con las paradojas,
tan sencillas,
a la vez que complicadas.
Entiéndeme, lee en mis manos
lo que no oyes en mi boca.
Y lee en este papel
lo que no oyes en mi voz.
Dicen que para ser feliz hay que sufrir,
y para sufrir hay que saber qué es
Felicidad.
Una risa, un guiño, una caricia.
Y seguimos con la paradoja.
En mis momentos de más inspiración
mas ganas tengog de estar callada
y dejar fluir mi mente.
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