Reseña 130: El gato que hablaba sin querer

70 páginas
Leído en 45 minutos

¡Hola chiquis! ¿Qué tal estáis? ¿El domingo, bien? Yo siempre tengo jet lag con los cambios de hora, y hoy me he despertado tardísimo. No me gusta nada que se cambie la hora pero bueno... ¡en una semana se me pasa esa sensación!

Ayer hice un viajecito exprés para ver a unos amigos y a mi chico, ¡se me ha quedado el cuerpo fenomenal! Está muy bien eso desconectar para conectar, así que hoy vengo súper contenta y con mil ganas de subir esta entrada, ordenar mi habitación... ¡Todo!

Bueno, os traigo hoy un libro de ediciones invisibles, de la cual me he enamorado. Bueno, me he enamorado concretamente de la colección el jardín invisible. La descubrí de casualidad mirando editoriales (soy de esas personas raras que adoran mirar catálogos y catálogos de diferentes editoriales), y tengo que decir que sus libros encendieron una parte dormida de mi corazoncito.

- Sinopsis-

Un buen día, Gaspard, el gato de Thomas, descubre que habla. En prosa y también en verso. Cuando quiere, y a veces cuando sería mejor que se mordiera la lengua, porque se le escapan cosas que seguro que acabarán por meterlos a él y a Thomas en un buen lío. 

Esta es la historia absolutamente cierta de este gato parlanchín y de su mejor amigo, un muchacho que tiene que ingeniárselas para que nadie descubra las extraordinarias habilidades de su gato. Al fin y al cabo, como todo el mundo sabe, ningún gato del mundo quiere hacerse famoso, porque… ¡se está tan bien al sol sin hacer nada!

- Reseña- 

Cuando empecé este libro, lo hice sin ninguna expectativa. No sé, la editorial que lo publicaba me transmitía muchísima tranquilidad y ternura, la portada y sinopsis de este libro también me atrajeron muchísimo, por lo que decidí pedirlo.

Cuando empecé a leerlo, la verdad es que iba pensando: ¿y esto es un cuento para niños? porque no lo parece... El vocabulario que empleaba me parecía difícil, y no creía que un niño de 10 años pudiese leerlo. Sin embargo, a medida que iba avanzando en la lectura me di cuenta de que este libro prácticamente no tiene edad. Sirve tanto para niños como para adultos, tanto para adolescentes como para ancianos. ¡Para todas las edades!

Si bien es cierto que a un niño le puede parecer difícil la lectura, junto la ayuda de un adulto puede seguir la historia perfectamente, y entender el mensaje final del libro.

He de confesar que lo que más me ha gustado del libro ha sido la moraleja final, la enseñanza que nos transmite y la dulzura con la que lo hace.

No quiero contaros mucho del libro, porque sé que a poco que lo haga, os destriparé gran parte del mismo. Pero quiero que sepáis que es un auténtico canto a los animales, al amor que hay que dedicarles y todo lo que nos puede aportar un animal.

Definitivamente, yo creo que cualquier niño pequeño podría disfrutarlo un montón, y también el niño que todos los adultos tenemos dentro. De verdad, es un libro que recomiendo encarecidamente.

Es un libro que directamente ha pasado a ser uno de los libros especiales que tengo, y sé que tengo que leer los cinco libros -de momento- que componen la colección, y espero que crezca porque de verdad que lo vale, y mucho.

¡Un besito y hasta el próximo domingo!

Mo-