Autor: Arthur Golden
Título: Memorias de una geisha
Páginas: (por consultar)
-Sinopsis-
En esta maravillosa novela escuchamos las confesiones de Sayuri, una de
las más hermosas geishas del Japón de entreguerras, un país en el que
aún resonaban los ecos feudales y donde las tradiciones ancestrales
empezaban a convivir con los modos occidentales.
De la mano de Sayuri entraremos un mundo secreto dominando por las
pasiones y sostenido por las apariencias, donde sensualidad y belleza no
pueden separarse de la degradación y el sometimiento: un mundo en el
que las jóvenes aspirantes a geishas son duramente adiestradas en el
arte de la seducción, en el que su virginidad se venderá al mejor postor
y donde tendrán que convencerse de que, para ellas, el amor no es más
que un espejismo.
Apasionante y sorprendente, Memorias de una geisha ha batido récords de
permanencia en las listas de superventas de todo el mundo y conquistado a
lectores en más de veintiséis idiomas. Su publicación en Suma coincide
con el estreno en España de la superproducción basada en esta novela.
-Opinión personal-
Habrá quien diga que soy una burra, o una inculta... pero la verdad es que no tenía ni idea de la cultura japonesa, y a decir verdad ahora tampoco tengo mucha idea, pero de lo que puedo estar segura es que me fascina. Los países orientales están 'cerca' de los europeos; me refiero a que si comparamos china con EEUU, pues ambos están a la misma distancia de España, ¿no? Y sin embargo, de EEUU conocemos mil monumentos, mil calles, mil empresas... Y en cambio, de esos países orientales, ¿qué? Muchísimo menos. Y es por eso que me fascina. Lo desconocido, impresiona.
Chiyo es una niña que va perdiendo su inocencia paulatinamente, sale de su pueblito, Yoroido para adentrarse en otra ciudad y encontrarse con un mundo completamente nuevo para ella, en el que la gente se interesa por su belleza y por su cuerpo.
Al principio, se rebela con esos intereses e intenta huir, pero su misión fracasa estrepitosamente y le costará caro, pues la bajan de nivel y la condenan a ser una criada durante toda su vida... Pero, como succede en las buenas novelas y en las buenas historias, su vida dará un giro cuando conoce a cierta persona.
Este libro lo tuve que leer con un subrayador, subrayando todas las frases bonitas e interesantes que me iba encontrando, pues sus páginas están cargadas de verdades. Sin duda, es un libro que te hará reflexionar y replantearte muchas cosas que creías saber...
Japón aparenta ser frío, frívolo, con esa gente ataviada con lujosos kimonos, la blancura de las caras de sus mujeres y con las elegantes ropas de los hombres, pero la verdad es que en su interior Japón está lleno de cultura, tradiciones y conocimientos que los países occidentales hemos perdido hace tiempo. En definitiva, este libro me ha hecho reflexionar mucho sobre este tema.
Si me preguntáis si recomiendo este libro, mi respuesta es un ROTUNDO sí.
''Antes de acabar os dejo un dato interesante sobre el libro. Arthur
Golden escribió el libro con la ayuda de su amiga y antigua geisha,
Mineko Iwasaki. Al parecer parte de la obra está basada en las
experiencia de Iwasaki, que en una entrevista le proporcionó hechos de
su vida para que Golden escribiese el libro. A cambio pidió al escritor
que lo revelase su nombre, pero éste la mencionó en los agradecimientos
del libro. Como consecuencia Iwasaki recibió numerosas amenazas y
críticas por haber violado el código de silencio de las geishas.
La retirada geisha denunció a Golden y le llevó a los tribunales,
alegando además que Golden retrató en su libro una falsa imagen de las
geishas, describiéndolas como prostitutas de lujo que venden su
virginidad. Al final todo se resolvió "amistosamente" con una cuantiosa
suma de dinero que Arthur le concedió a Iwasaki.''
Y con esto, doy por finalizada esta reseña.