Reseña 107: Dieciocho meses y un día

¡Hola! Os dejo esta entrada programada porque este fin de semana me pilláis en Benavente, ¡relajándome un poquito!

Hoy os traigo un libro que he leído este mes, y la verdad es que me tiene muy dividida. Es un libro un tanto especial y que no deja indiferente a nadie. ¡Dentro reseña! 

Leído en 3 tardes
288 páginas

El libro lo leí en ebook, así que no puedo deciros mucho de cómo me pareció la maquetación, pero la portada es enigmática, y aunque quieras buscar algún detalle del libro en ella, es imposible. No tienes otra opción que abrir el libro e indagar dentro de él. 

Bueno, yo leí una reseña del libro en el blog de Ali, 'Leo la lluvia caer' y la verdad es que en su momento me llamó la atención, pero hasta que no lo vi por Amazon no me animé a comprarlo. 

Ahora bien, os hablaré de las cosas que más me han impactado del libro: TODO. 

La construcción del personaje principal es brillante. La autora ha dado vida a una enferma mental que no se reconoce como tal (qué raro en los enfermos mentales, ¿no?) y al estar contado el libro desde su propia perspectiva, nos adentra muchísimo en la obra. Conocemos de primera mano sus

pensamientos, comportamientos, paranoias... 

Además del personaje principal, también considero que es muy importante mencionar a los personajes secundarios, pues en este libro concretamente, aporta bastante a la obra. Considero que la autora emplea a Lucas para ilustrar la personalidad opuesta de la protagonista, y poder darle una perspectiva diferente a la realidad. 

También me ha encantado cómo son las sesiones de la enferma con su psiquiatra, la doctora Duran. Personalmente, me ha aportado una nueva visión de cómo reciben las sesiones terapeúticas los pacientes que van a psiquiatría. Además, la autora lo hace tan bien que yo me he sentido como la protagonista, y las palabras de la psiquiatra me han calado hondo, como si estuvieran dirigidas a mí. 

Dejando a un lado los personajes, la ambientación también es muy diferente. Todo el libro, todo, ocurre en un único sitio: entre las cuatro paredes de su casa. Con esto, la autora consigue que el lector  sienta la misma agorafobia que padece la autora, tenga esa sensación de claustrofobia y de agobio. De verdad, yo tenía esa sensación mientras iba leyendo y pensaba: madre mía, si yo me siento así, ¿cómo se sentirá la protagonista?

El final. Qué deciros del final. De todos los finales posibles que podáis imaginar, no os imagináis este. Os lo digo sinceramente. Y esto es lo que me tiene dividida, por una parte, me dan ganas de mandar el libro al carajo por el final, pero por otra parte, esto es lo que lo hace tan especial, y continúa perfectamente con el hilo de la historia. 

Un libro que impacta, sorprende y hace reflexionar. No quiero contar mucho más, porque creo que es muy importante que vayáis a ciegas y que os sorprenda. Eso sí, no os garantizo que os sorprenda gratamente, porque para gustos, ¡colores!

Por último, me dirijo a la autora (si algún día me lee, cosa que dudo) para decirle que olé, olé y olé por este libro. ¡Una pasada! 

Un besito, Mo-

Reseña 106: La sonata sin nombre

Leído en 2 días
314 páginas

¡Hola! ¿Qué tal estáis? Espero que esté todo yendo sobre ruedas, y que estéis cumpliendo las expectativas que teníais respecto a este curso. Por mi parte estoy muy contenta con la carrera y se me han pasado volando las semanas.

Hoy os traigo la reseña del último libro que he leído. Casualidades de la vida, el domingo subí reseña del primer libro que leí en verano y hoy os traigo el último. Bueno, ¡pues vamos allá!

'La sonata sin nombre' es un libro de la editorial Penguin Random House, a mí me llegó en formato papel, con solapas duras. La maquetación de la portada me pareció un poco pobre, para ser sinceros, y por eso me costó mucho arrancar a leerlo. La sinopsis me llamaba la atención, pero me faltaba algo para coger el libro y empezar a leerlo.

El libro que me llegó tenía algunas páginas en las que las letras no se leían bien porque no tenía tinta. Parecía que la imprenta se estaba quedando sin tinta e imprimieron el libro igualmente. A pesar de que las letras no eran negras del todo (más bien grises), se podía leer perfectamente, por lo que no lo tendré muy en cuenta.

¡Bueno! El libro lo podríamos definir como un libro histórico-novela. No sé muy bien cómo clasificar los libros, pero si habéis leído 'Dime quién soy' de Julia Navarro y os gustó, os aseguro que este también os encantará.

Trata de un músico que se enamora de una mujer, tienen una historia juntos y después de muchísimos años sin verse, la mujer quiere transmitirle un último mensaje. Entonces Elena, la protagonista, se verá implicada en la misión de hacerle llegar al músico la última frase que le dedicará su amada.

“Piensa que las cosas no son blancas o negras, sino que casi siempre son malditamente grises”

Lo primero que me llamó la atención del libro fue el ritmo de la historia. Va a un ritmo lento, y la historia se va creando poco a poco, con tranquilidad y construida sobre unos buenos cimientos. Los personajes van apareciendo en la historia de forma gradual y esto es algo que se agradece mucho. Nada de presentarte a 10 personajes de golpe, luego que desaparezcan 3, luego aparecen 5 secundarios... Te haces un lío. Aquí estamos hablando de unos 10 personajes, y la verdad es que están muy bien perfilados.

La trama se desarrolla a un ritmo perfecto. Creo que nunca había leído un libro con un ritmo así. Podía leer despacio, tranquilamente. La autora no pierde detalle, es generosa con los pensamientos de la protagonista, le da el tiempo adecuado para que asimile los acontecimientos, le da tiempo para enamorarse... ¡Todo! Me ha encantado. ¿He dicho ya que me ha gustado mucho? ¿Sí?

“Porque, aunque el pueblo muera de hambre, el mundo seguirá girando y los ricos seguirán teniendo dinero para sus fiestas. En fin...”

La pluma de la autora es maravillosa, rica en vocabulario y con frases cortas y concisas. No sé por qué, pero muchas veces los libros que tratan de historia pecan de parecer manuales de historia con frases imposibles de leer en voz alta porque te quedas sin aire, kilométricas. En cambio, este libro es maravilloso.

En definitiva, creo que se ha sobreentendido bastante bien que el libro me ha gustado muchísimo, y que de haberlo sabido lo hubiese leído antes y no habría esperado tanto a leerlo. Una historia preciosa, sencilla y que se disfruta un montón.

Lo recomiendo al máximo si os gustó el libro de Julia Navarro que he dicho antes, o si queréis adentraros un poquito en el género de la novela histórica y no sabéis por dónde empezar. Definitivamente voy a seguir a Beatriz O'Shea de cerquita. Es el primer libro que publica, y estoy segura de que si publica algún otro libro, consideraré leerlo.

¡Un besito, y feliz semana!

Mo-

Reseña 105: Esta princesa ya no quiere tanto cuento.

¡Hola! ¿Qué tal estáis? Yo ya estoy como nueva, con un montón de reseñas por traeros y con muchísimas ganas de retomar el blog. Para mi vuelta, os traigo esta reseña que es una colaboración con la editorial, desde aquí quiero darles las gracias por el envío del ejemplar.

400 páginas
Leído en 8 noches

El libro tiene una temática súper diferente a los que he leído hasta ahora. No sé vosotros, pero yo nunca había leído alguno de un paciente con personalidad múltiple y de una psiquiatra que le trata. Al principio el libro empieza así. Parece que están todas las cartas en la mano, pero cerca del final toda la historia se echa por tierra y hay unos giros absolutamente inesperados que a mí, por lo menos, me dejaron alucinando.

La lectura es una combinación de grandes dosis de humor, misterio y erótica. No voy a mentir; hay escenas eróticas detalladas y preciosas, pero se queda en eso: escenas.

La autora no peca de escribir un libro en el que los protagonistas están todo el rato haciendo el amor salvajemente, y después, introducir alguna escena que permita contar la historia de ambos protagonistas, como sucede con la famosa trilogía de las sombras de Grey.

Es un libro con una trama muy buena, diferente y sorprendente.  Se introducen algunas escenas eróticas, y eso me ha gustado muchísimo por lo que he dicho antes: son simplemente escenas.

Él solo me condujo hacia las puertas del infierno, fui yo el que se lanzó de cabeza.

La forma de escribir de la autora es fluida, fácil de leer, amena y muy agradable. No encontré ningún fallo gramatical ni ortográfico, y eso es algo que se agradece muchísimo. La extensión de la historia me ha parecido que es la justa, aunque el final me hubiese gustado alargarlo un poquito, me ha parecido que pasaba todo muy rápido.

Sin embargo, verdad que los acontecimientos también pasaron rápido, y lo que ha hecho la autora ha sido compaginar la rapidez de la historia con la rapidez de la pluma. Al final del libro hay un epílogo que... bueno, me hubiese gustado que explicara algo más. Creo que el epílogo fue lo más predecible del libro, pues todas las cosas que contaba me las esperaba. Aun así, lo disfruté muchísimo y me dejó muy buen sabor de boca.

No os dejéis engañar por el número de páginas (ya sé que son 400), ni por el número de noches que he tardado en leerlo. Tened en cuenta que estaba en exámenes y leía sólo 10-20 minutos cada noche, y muchas de ellas me quedaba dormida a medio leer. Estoy segura de que de habérmelo leído fuera de la época de exámenes, lo hubiera devorado en dos o tres días.

Hay algunas cositas que no me han terminado de gustar del todo. El libro, en cierta medida, es predecible pero no quiero decir que todo el libro sea así y que me haya aburrido, sino que a veces sabía lo que iba a pasar próximamente. Sin embargo, tengo que decir también en su favor que siempre había algún detalle que no me esperaba y me emocionaba.

Sin embargo, por último y no por ello menos importante, es más, creo que es lo más importante que voy a decir, hubo un momento (el momento de la casa de cinco plantas... los que lo hayáis leído sabréis de lo que hablo) que me emocionó muchísimo. Me pareció una auténtica pasada, no llegué a llorar pero tenía un nudo XXL en la garganta que me impedía despegar los ojos del libro. ¡Brutal! Ese momentazo fue increíble, la verdad.

¿Que si lo recomiendo? 

Sí, sí, y mil veces sí. 

¡Un besito!

Mo-